Tatuajes y la discriminación laboral.


Tatuajes y la discriminación laboral.


Debate y entrevista a artistas del tatuaje.


“La discriminación es la única arma que tienen los mediocres para sobresalir.” – Guillermo Gapel.

Durante este mes se ha hablado sobre los tatuajes y que impacto tienen dentro del sistema laboral mexicano que es extremadamente conservador y por ende sus políticas, criterios y procedimientos recaen en lo obsoleto.


Haciendo entrevistas y tomando opiniones de varias personas se logró obtener algunos enfoques desde todos los criterios sobre el tema de los tatuajes y es que, generalmente, un tema tan polémico como este recae en la relatividad pues está en función de la percepción y el pensamiento de cada individuo y todos los tipos de pensamientos y opiniones deben ser respetadas así como las decisiones de portar o hacerse un tatuaje o modificación corporal.

Pasando a las preguntas, se debe aclarar que, al leer las siguientes opiniones deben tomarse con respeto y aceptación a pesar de lo bien o mal que puedan ser o estar fundamentadas. Además debe aclararse que, siendo un artículo sobre la discriminación laboral se establecerán las respuestas en dos partes, la parte laboral o de reclutamiento (L), la cual podrá parecer la ofensiva o discriminante y la parte reclutada o contratada (C), es decir el empleado o candidato y debe imaginarse la conversación con las preguntas y el enfrentamiento verbal entre ambos lados.

1.- ¿Se considera ‘discriminación’, negarle trabajo a una persona tatuada?

L: No debe considerarse discriminación porque un tatuaje es una decisión y no algo adscrito o con lo que se nace, la persona decide hacerlo, cómo, qué y dónde, por lo que no debe ser considerado discriminación negarle a alguien empleo en especial porque existen trabajos en los que se necesita presencia y el tener un tatuaje podría general algún problema.

C: Si es discriminación porque la discriminación comienza por juzgar a las personas por su apariencia, sin tomar en cuenta las capacidades que tienen o lo que pueden llegar a ser/hacer. Un tatuaje no cambia nada el hecho de si está preparado o no. Para todo debe haber límites, si el tatuaje es visible o no, la empresa debe respetar.

2.- ¿Dejarías tu vida en manos de una persona con tatuajes racistas o discriminantes para algunas comunidades o minorías?

C: Pues si, en realidad no tiene nada que ver el que lo tenga mientras sepa lo que hace, por ejemplo un doctor puede tener un tatuaje de la muerte pero si sabe, si tiene experiencia ¿por qué afectaría?, el tener un tatuaje no cambia nada. Todos tenemos diferentes ideologías pero eso no cambia el hecho de que podría salvarte la vida. Una cosa es lo que haya estudiado o en lo que se haya preparado y otra lo que el crea.

L: El hecho de hacerte un tatuaje es masoquismo, pues te estás haciendo daño para inyectarte tinta por lo que sería realmente considerable el dejar una vida en manos de alguien que se hace daño a sí mismo.  Posiblemente no teniendo otra opción, pero no si el individuo presenta tatuajes que generen completa desconfianza.

3.- ¿Qué pasaría si fuera estrictamente necesario, para salvarse la vida, hacerse un tatuaje médico?

L: Ciertamente, considerando cuestiones fisiológicas, algunas personas son alérgicas a la tinta o su umbral del dolor no tolera las agujas por tiempo prolongado y constante por lo que, visto desde ese punto, debe prescindir de esa medida. No obstante, de ser así, en el entendido de salvar la vida, si sería aceptable hacerlo.

C: Muchos de los tratamientos para la salud, atacan a la misma salud, por ejemplo las quimioterapias no solo atacan a las células cancerígenas si no a todas las células, una cirugía consiste en cortar y herir el cuerpo pero se hace con la finalidad de salvar la vida pues a veces son necesarias ese tipo de intervenciones entonces un tatuaje, pues si va a curar, debe aceptarse el tratamiento por más doloroso que pueda ser.  Además, las pulseras suelen romperse o extraviarse y pues para salvar la vida y mientras la persona esté de acuerdo, pues adelante.

4.- En el escenario de un activista con tatuajes, sabiendo de la existencia de problemas como el hambre, la pobreza extrema y desigualdad, y pudiendo donar el dinero para combatirlo ¿debería considerarse como una inversión hacerse un tatuaje?

C: Donar dinero no es la única forma de ayudar, ¿un tatuaje cuesta dinero? Sí, pero no solo se ayuda con dinero, se puede hacer con trabajo, voluntariado o de muchas formas y además un individuo no puede vivir siempre dando todo a todos y nada a sí mismo, también es completamente válido atenderse y darse a sí mismo.

L: De acuerdo, la vida y cuerpo es individual y se puede invertir o gastar en sí mismo con libertad, el problema es que hay demasiados activistas que hacen muchas tonterías, podrán ayudar mucho y todo pero realmente gastan o invierten en tonterías que definitivamente van contrarias a sus esfuerzos, por ejemplo comprarse ropa nueva y de moda o artículos sintéticos que dañan al medio ambiente.

5.- ¿Se le puede considerar a cualquier tatuaje como parte de la cultura?

C: No se tomaría como parte de la cultura sino más como una moda de la sociedad actual pues existen personas que aún se reúsan a aceptarlos pero, ya, por gran parte de la sociedad son bien vistos.

L: Muchos tipos de tatuajes, como los que se realizaban las tribus y comunidades en tiempos antiguos para identificarse entre ellos y para contar su historia o darse jerarquía dentro de la comunidad si pueden considerarse como culturales, pero se debe aceptar que existen tatuajes hoy en día que son una tontería o no tienen una importancia relevante y no deberían ser considerados como parte de la cultura.



Ahora bien, pasando a la entrevista a los profesionales de la tinta, estas fueron las preguntas y respuestas. Se entrevistó a Josh y Cesar.

1.- ¿Que percepción crees que tiene, la sociedad en que vivimos, de las personas tatuadas?

Cesar: Depende bastante en cuanto a las generaciones, obviamente los papás y los abuelos tienen una percepción cómo de tabú, un poco más cerrados en cuanto a los tatuajes. La aceptación, tal vez nuestros papás y nuestras generaciones lo aceptan más; últimamente he visto mucha aceptación pues las personas que se tatúan son de entre 30 a 45 años y jóvenes y eso es algo bueno porque el tatuaje ha ido entrando más en la cultura.

2.- ¿Alguna vez te has sentido discriminado por tener tatuajes o modificaciones corporales?

Josh: Claro, no siempre, pero si me ha tocado, por ejemplo en hospitales, una vez que llegué de gravedad y me vieron los tatuajes y me trataron como con pincitas, se referían a mí con términos como “el tatuado”; también me dedico a la fotografía y muchas personas me han dicho, cuando ven a las personas que trabajan conmigo y ven sus tatuajes me dicen que no pueden trabajar.

3.- ¿Qué piensas sobre la discriminación laboral en México por tener tatuajes o modificaciones corporales?

Cesar: Todo está en la persona y en lo que hace, un tatuaje no te impide hacer o desempeñar lo que quieres o a lo que te dedicas.

4.- ¿Qué opinas sobre la frase “mujer tatuada, mujer devaluada”?

Josh: ¡Qué duro!, ¿no?, se oye muy misógina la onda, tendría que haber una frase igual para el hombre pero no debería haber esa discriminación a un género; de hecho, las mujeres son las que más se ‘rayan’, son las que más se tatúan, creo que tengo más clientas que clientes y no por eso son malas o se van a ver afectadas.

5.- ¿Dirías que la imagen de las personas tatuadas se ve afectada por el criterio social, religioso, histórico o cultural?

Cesar: Obviamente, al menos en México, la religión tiene un peso bastante fuerte así seas muy joven o mayor, la religión sigue imponiendo muchas cosas a veces también depende la imagen que tienen como tu familia, o los lugares a los que llegas, en cuanto a región tal vez un poco pero se ha ido adaptando y aceptando poco a poco e insisto que es un tema generacional, tiene que ver mucho como lo ven las generaciones.

6.- ¿Consideras que los tatuajes forman parte de la cultura? ¿Por qué?

Josh: Si, claro, ahora ya, bueno de hecho han estado desde hace mucho tiempo, por ejemplo los aztecas se tatuaban, los mayas se tatuaban y la gente no se pone a leer o a investigar pero los tatuajes han estado siempre en la cultura, últimamente está entrando más en nuestra cultura pues hay una mayor aceptación.



Efectivamente podemos decir que, la sociedad en la que vivimos ha ido incrementando la aceptación de los tatuajes y modificaciones corporales aunque si, en muchos casos siguen siendo símbolos de rebeldía y libertad, lo cual no es malo pues siempre se necesita ese equilibrio en una sociedad para que pueda progresar con las actualizaciones y modificaciones que las minorías y comunidades inconformes exigen.

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